La impresión 3D es un proceso para convertir gráficos tridimensionales en objetos físicos. Gracias a este sistema es posible crear maquetas, alimentos, prótesis y todo aquello que pueda imprimirse en tres dimensiones. Sin lugar a dudas, la impresora 3d es uno de los inventos más revolucionarios del siglo XXI.
El desarrollo de esta tecnología ha propiciado el crecimiento de diversos negocios, que han aplicado la impresión 3D para fabricar diversos artículos y han encontrado una gran respuesta del mercado. A continuación presentamos cuatro ideas de negocio exitosas con impresión 3D.
Recreus
Ignacio García es un ingeniero de Elda (Alicante) que descubrió un filamento de impresión con propiedades flexibles, un proyecto en el que trabajaba varios meses para imprimir piezas para sus modelos de aeromodelismo, una de sus aficiones.
Para promocionar su descubrimiento, en 2012 fabricó zapatillas impresas en un equipo doméstico.
Ello se publicó en blogs especializados y medios de comunicación de todo el mundo.
En 2015 nace Recreus con el objetivo de dar cobertura a los pedidos que recibía. Las facturaciones alcanzaban los 500.000 euros.
LGM Estudio
Luis Gómez fundó LGM Estudio para crear diseños de forma independiente.
La compañía se ha especializado en soluciones de microtransporte electrónico.
De este modo, atiende encargos de producciones muy cortas, como aquellos provenientes de Suecia para triciclos con remolque para la venta en la calle de comida.
De acuerdo con el propio fundador, el objetivo final es imprimir todo el vehículo y montar las piezas, pero se trata de un procedimiento muy costoso.
Gómez compró una impresora valorada en 4.000 euros y, tras una breve capacitación, inició su aventura. Hoy en día se centra en elaborar diseños de prototipos personalizados para el vehículo.
UNYQ
Manuel Boza es un ingeniero especializado en robótica que decidió estudiar dicha carrera debido a que sufrió la amputación de una pierna a los 16 años.
Como consecuencia, buscó desarrollar mecanismos que faciliten su integración a la sociedad y ayudar a otras personas.
Así nació Unyq, que se dedica a fabricar cubiertas únicas para todo tipo de prótesis de brazos y piernas.
Boza trabajó en Össur, una de las empresas más reconocidas en prótesis avanzadas. No obstante, según Manuel Boza, no se habían fijado en el detalle de las prótesis personalizadas, algo que muchas personas querían mostrar.
Por ello, y con el desarrollo de la tecnología 3D, puso a andar su proyecto de manera viable y económica.
Triditive
Mariel Díaz Castro emprendió Triditive el 2014 en Gijón, junto a dos socios fundadores.
La compañía ofrece servicios de ingeniería y producción, así como de fabricación aditiva.
Actualmente, trabaja con empresas médicas, educativas, del sector electrónica, mecánica, artesanos, etc. No obstante, la alta demanda ha impedido que acepte pedidos de muchos clientes, debido a su limitada capacidad.